Recuerda cuando las cosas eran raras y bonitas,
y daban miedo y daban risa de tan por estrenar que parecían.
Y no podíamos esperar a que empezaran a pasar
y era tan sólo cuestión de tiempo que nos desbordaran los acontecimientos.
Y recuerda lo que pensaban de nosotros no hace tanto.
Seguro que todavía guardas fotocopias de todo aquello en algún lado, mitómano.
Y estábamos de acuerdo porque aún nadie había movido un dedo.
Y como aún todo cuadraba y estaban esperando, no se notaba tanto que
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
Y quizá, quizá el mejor momento de las cosas es cuando no han pasado,
porque luego todo lo que puede hacerse es comentarlo
y esperar a que estén a punto de pasar cosas nuevas y ocuparse de ellas.
Y estar todos de acuerdo cuando aún nadie haya movido un dedo.
Y esperar que todo cuadre y, mientras lo intentamos, que no se note tanto que
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
No tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...
no tienen ni idea ...